Generosidad es
dar sin ningún tipo de interés, sin esperar resultados o contraprestaciones. Es
un acto sincero que nace desde el corazón. Por eso cuando damos de verdad,
también recibimos y nuestra prosperidad aumenta.
Somos
generosos cuando damos al que no tiene pero también cuando compartimos algo con
quien ya disfruta de ello. Somos generosos cuando, demos lo que demos y a quien
se lo demos, lo hagamos realmente por placer y sin condiciones ni obligación
alguna.
Ser generoso
no solamente consiste en entregar a otros bienes materiales; también podemos
regalar una sonrisa, un gesto de apoyo, nuestro tiempo y dedicación, unas
bonitas palabras y un sinfín de cosas más.
La generosidad
también incluye el deseo de que el bien y la abundancia nos lleguen a todos y
no sólo a ti mismo así como el hecho de tratar a los demás seres con verdadero
amor y respeto.
Se puede
ser generoso dando realmente muy poco; tan sólo hace falta que sea un gesto
auténtico, positivo, y que nos salga de lo más profundo de nuestra alma.
La mayor
generosidad se basa en ayudar a los demás a liberarse de todas sus cargas y
limitaciones para que puedan seguir avanzando en la vida si eso es lo que ellos
desean.
LA GENEROSIDAD ES UN TESORO QUE TE PUEDE HACER FELIZ
ETERNAMENTE.
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